lunes, 29 de abril de 2024

ESTACIÓN IVITA-MARANGANÍ. BREVE RESEÑA

 

A raíz de las celebraciones de las bodas de Diamante de la estación del IVITA-Maranganí realizada el 26 de abril del año en curso, Francisco Franco F y Felipe San Martín H presentan una breve reseña de la historia de la estación de la llamada IVITA-La Raya primero y luego IVITA-Maranganí.

 

 

Estación IVITA-Maranganí



Estación IVITA-Maranganí

Francisco Franco F.
Felipe San Martín H.

    La Granja Modelo de Auquénidos La Raya (en adelante denominada La Raya), fue creada mediante la ley N°11207 para la enseñanza e investigación, el 23 de junio de 1940, por el Ministerio de Agricultura. La Raya se haya ubicada entre los departamentos de Puno y Cuzco, en las provincias de Melgar y Canchis, distritos de Santa Rosa y Maranganí.

En los primeros años de creada La Raya, esta tuvo una relación estrecha con la Facultad de Medicina Veterinaria de la UNMSM, cuyos docentes empezaron a generar mucha información científica sobre los camélidos sudamericanos. Entre ellas las del Dr. Alberto Cubas Caparó sobre la osteomielitis  del maxilar inferior en alpacas y el del Dr. Elmo de la Vega Diaz sobre la histología del tracto digestivo de la alpaca. Así mismo, los trabajos del los Drs. Carlos Chávez García en parasitología de camélidos sudamericanos, Mauricio San Martín Fraysinett en fisiología reproductiva en alpacas, Augusto Vallenas Pantigozo en fisiología de la alpaca, Max Lombardi sobre las variaciones fisiológicas de los niveles de fósforo y calcio inorgánico sanguíneo, entre otros.

 

Doce años después, el Ministerio de Agricultura transfiere La Raya, para fines de enseñanza e investigación, a la recién reaperturada Universidad Nacional Técnica del Altiplano (UNTA) (ley N°13516, 29 de abril de 1962).

 

El Instituto Veterinario de investigaciones Tropicales y de Altura (IVITA) inició sus actividades el 20 de diciembre de 1962, en virtud de un convenio internacional entre la FAO y el gobierno peruano, en el que las Naciones Unidas contribuyó con un fondo especial para adquisición de equipos, becas y pago de expertos, mientras que el gobierno peruano, a través del IVITA, se comprometió con instalaciones de estaciones experimentales en diferentes regiones de la sierra y selva del país, el contrato de personal, tanto investigadores como administrativos, y los gastos de mantenimiento.

 

En 1964, mediante la firma de un convenio colaborativo entre el IVITA y la UNAP, la dirección del IVITA destaca en La Raya, como profesional permanente, al MV. César Novoa Mostacero, además de dos empleados; así mismo, envía a Macusani-Puno al MV. José Alva Mostacero.

 

Según Decreto supremo N°131-70-AG y de conformidad con los artículos 12, 13 y 14 del Texto Único Concordado del Decreto Ley N° 17716, el 13 de marzo de 1970, se afectan los fundos de la UNTA: La Raya, Tambopata y Tahuaco y pasan a manos nuevamente del Ministerio de Agricultura.

 

El Ministerio de Agricultura mediante RM N°3127-71.AG, en consideración a la necesidad de impulsar la investigación en camélidos sudamericanos, aprovechar la capacidad instalada en La Raya, única en el Perú y el mundo y, debido a  la importancia socio-económica de estas especies para el poblador altoandino, aprueba, el 30 de julio de 1971, un contrato para la investigación de los camélidos sudamericanos en La Raya, entre la Zona Agraria XII-Puno del Ministerio de Agricultura y el IVITA, brindándose al IVITA áreas para alojamiento, laboratorios, campos de pastoreo y animales para experimentación.

 

La Dirección General de Reforma Agraria y Asentamiento Rural, el 15 de noviembre de 1973, mediante Resolución Directoral N°2834-73-DGRAYAR, cede en uso La Raya incluyendo infraestructura y semovientes a favor de la ex Zona Agraria XII – Puno para que sea dedicada a la investigación y fomento de la cría de alpaca; al mismo tiempo que a la UNTA se le abona el valor de bienes afectados de acuerdo con el artículo 13 del texto Único concordado del Decreto Ley N°17716, por un valor de S/. 14,529,722.

 

El 11 de diciembre de 1980 alrededor de 300 estudiantes de la UNTA invaden las instalaciones de La Raya, denominada en ese entonces Centro Nacional de Camélidos Sudamericanos-La Raya, llevándose 5,500 alpacas entre machos, hembras jóvenes y hembras preñadas al sector de Machuhuasi-Puno, en los días posteriores La Raya recupera 2,500 alpacas, 300 vicuñas y un bañadero antiparasitario.

 

A mediados de 1983 La Raya sufre su primer atentado terrorista por sendero luminoso, ocasionando daños en las diferentes instalaciones y laboratorios, la mayoría construidos por el IVITA.

 

Mediante Ley N°24174, emitida en junio de 1985, La Raya es dividida y entregada a las dos universidades públicas de las regiones de Puno y Cuzco, Universidad Nacional del Altiplano de Puno (UNAP) (antes UNTA) y la Universidad San Antonio Abad de Cusco (UNSAAC), respectivamente. La UNAP pone en funcionamiento el Centro Experimental La Raya y la UNSAAC crea el Centro Experimental: Centro de investigación en camélidos sudamericano-La Raya (CE,CICAS-La Raya).

 

En vista de la precaria situación del IVITA ante la cesión de los terrenos e infraestructura de la Raya a ambas universidades y las amenazas de sendero luminoso que, el 19 de mayo de 1986, realiza su segundo atentado terrorista, incendiando instalaciones y laboratorios, se tomó la decisión de trasladar os laboratorios y oficinas administrativas a la ciudad de Sicuani.

 

El 18 de enero de 1986 el IVITA recibe del alcalde del distrito de Maranganí, Sr. Braulio Bustamante, el ofrecimiento de la donación de un terreno para la construcción de la Estación Experimental IVITA-Maranganí; donación que fue aceptada oficialmente por la universidad mediante RR N°84415 el 8 de mayo de 1986.

    Debido a gestiones de las autoridades del IVITA en agosto de 1993, se adquiere un terreno en Maranganí, en el sector Trinidad, creándose el Fundo San Marcos del IVITA-Maranganí. Después de nueve años de la donación del terreno en

El Fundo San Marcos
Maranganí, y gracias al trabajo y esfuerzo del personal administrativo en la construcción del edificio compuesto de laboratorios, alojamiento para estudiantes y oficinas administrativas, el 28 de abril de 1995, se inaugura el local de la Estación IVITA-Maranganí. Esta estación se halla ubicada en el Departamento del Cusco, Provincia de Canchis, Distrito de Maranganí, y posee dos locales propios: El fundo San Marcos con un área de 6,3 ha y la Estación propiamente dicha de aproximadamente 1,400 m2. Además, por convenio UNSAAC se cuenta con un área de 600 ha de pastoreo para alpacas y llamas en el sector denominado La Raya. Las autoridades de aquel entonces fueron: Rector Wilson Reátegui, Decano Juan Espinoza, Director General del IVITA Felipe San Martín, Director de la Estación Ramiro Farfán.


Investigadores y ganado en Fundo San Luis 

El 25 de abril de 1995 se suscribe el primer Convenio de cooperación interinstitucional entre la UNSAAC e IVITA para realizar investigaciones y actividades académicas conjuntas. Este primer convenio finalizó en noviembre de 1998, y como consecuencia, el l9 de junio de 1999, los animales experimentales del IVITA se desplazaron temporalmente de La Raya a un terreno alquilado para pastoreo en el Fundo San Luis en Nuñoa, Puno, hasta abril del  2001, en el que se firma un nuevo convenio interinstitucional entre IVITA y la UNSAAC, retornando los animales experimentales a La Raya. A partir del 2001, cada cinco años se ha ido renovando el convenio IVITA-UNSAAC hasta la fecha. El último convenio con una vigencia de cinco años se firmó el 22 de abril de 2022.

    La estación en sus 60 años ha contado con un número importante de Coordinadores primero y luego Directores. Siendo estos los siguientes docentes investigadores sanmarquinos: César Novoa Mostacero, Julio Sumar Kalinowski, Enrique Franco Llaury, Ramiro Farfán Loyza, Wiber García Vera, Danilo Pezo Carreón, José Angulo Tisoc y Francisco Franco Febres.   

    El IVITA-Maranganí, El 26 de abril del 2024, cumplió sus bodas de diamante de labor ininterrumpida primero en La Raya y luego en Maranganí, trabajando especialmente con Camélidos sudamericanos domésticos, especies de enorme importancia y trascendencia para nuestro poblador altoandino. Muchos investigadores y administrativos han pasado por esta Estación a los que les estamos enormemente agradecidos por su dedicación y entrega. Vaya para ellos el mejor de nuestros reconocimientos.

 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario