lunes, 26 de agosto de 2024

SEMBLANZA DEL DR. HERNÁN MÁLAGA CRUZ

Presentamos el  discurso de orden pronunciado por el Dr. Hugo Samamé, médico veterinario y destacado docente universitario, durante la ceremonia en la que se distinguió al Dr. Málaga con el título de Doctor Honoris Causa de la Universidad Ricardo Palma. En su intervención el Dr. Samamé ofrece una breve reseña de la trayectoria académica del Dr. Málaga, la cual ha estado dividida entre la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y diversas universidades  entre las que destacan la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, la Universidad Peruana Cayetano Heredia y la Universidad Ricardo Palma.


 

SEMBLANZA DEL DR. HERNÁN ALFREDO MÁLAGA CRUZ

MV, MSci. Hugo Samamé Beltrán

docente de la FMV de la URP 

Debo agradecer al decano de la facultad de Ciencias Biológicas Dr. Tomás Agurto Sáenz, al director de la escuela profesional de Ciencias Veterinarias Dr. Guillermo Leguía Puente y a su comité directivo, por considerar mi intervención en tan importante acto académico como es la incorporación del Dr. Hernán Málaga Cruz como Doctor Honoris Causa a esta casa de estudios.

El Dr. Hernán Alfredo Málaga Cruz, tercero de cinco hermanos, nació un dos de agosto en el distrito de Barranco, en el seno del hogar conformado por la distinguida dama piurana Doña Lucila Cruz Céspedes de Málaga y Don Fermín Víctor Málaga Prado, a la fecha capitán de caballería del glorioso ejército peruano, y sus hermanos Marcia Ethel Pilar y Héctor Fermín a los que se unirían más tarde sus hermanos Lucy Beatriz y Marcos Alejandro.

El Dr. Málaga transcurrió  sus primeros años entre los distritos de Barranco y Chorrillos, siendo el colegio San Luis de Barranco donde inicio sus estudios en 1949; sin embargo, razones de responsabilidades paternas le permiten recorrer diversas parte de nuestro país por unos años antes de volver a su querido colegio, al segundo de secundaria, donde se encontró con un compañero de aula, el hoy médico veterinario Dr. Gabriel Romero Privat, con el que estudiaron juntos en las aulas universitarias.

Sin ser infidente, el Dr. Romero me mencionó la afición del Dr. Málaga por la música, en especial la música criolla, cuenta que no había reunión en la que Hernán no interpretara con mucho sentimiento, a capela o con acompañamiento, el vals Anita, dedicada a su querida esposa la señora Ana Luisa Socoro Mas Vergara, con la que tienen tres hijas: Ana, Lucila Ana y Vanesa Alejandra.

Don Hernán Málaga siempre se destacó, desde sus primero años de estudios, en los cursos de matemáticas, lo que creo ha sido parte importante en los éxitos alcanzados en su tan brillante carrera profesional y académica.

En 1961, ingresa a la Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM), obteniendo la mejor nota en matemáticas; sin embargo, su inclinación a la medicina veterinaria es consecuencia de la influencia personal de un muy distinguido maestro el Dr. Carlos Saldaña y, como menciona en su memoria, por la experiencia de haber criado gallinas en casa.

En la UNMSM conoce a sus compañeros de clases, algunos de ellos presentes en esta ceremonia, que se inician en la Casona de San Marcos, con pre-veterinaria, lo que hoy correspondería a una suerte de estudios generales. En 1962, pasa a la Facultad de Medicina Veterinaria en Cahuache, hoy lindero norte del distrito de San Borja. Resalto el segundo año de facultad durante el dictado del curso Bacteriología y Virus, donde yo era ayudante alumno y tuve el placer de conocer al Dr. Málaga quien era un joven muy estudioso y proactivo dentro de su promoción. En cuarto año de facultad, quinto de la carrera, fue contratado como asistente o ayudante alumno en la cátedra de Zootecnia, que jefacturaba el Dr. Saúl Fernández Baca. Concluidos sus estudios de pre grado, incluidas sus práctica pre profesionales, se gradúa de médico veterinario con la tesis “Displasia coxofemoral en perros”, bajo la dirección del Dr. Gustavo Ayllón.

Siendo médico veterinario tuvo propuestas de diferentes entidades y decide ingresar a la docencia como jefe de prácticas a través del Instituto de Zoonosis, teniendo como mentor al Dr. Juan Zapatel, siendo director del instituto el Dr. Carlos Chávez García. En esos tiempos, un acontecimiento importante en la vida del Dr. Hernán Málaga, fue su asistencia a un curso Internacional de Zoonosis, donde tuvo como profesores a los Drs. Ribero Netto y Robert K. Anderson, de Bioestadística y Epidemiología, respectivamente, que marcaron un hito en la vida del joven Dr. Málaga.

En junio de 1967, obtuvo una beca de la OPS, viajando a los EEUU, primero a Washington, por razones del idioma, y en agosto, pasó a la Universidad de Davis, California. Se debe mencionar que en esos tiempos el Dr. Málaga inició una estrecha amistad con uno de los más distinguidos médicos veterinarios de Latinoamérica el Dr. Pedro Acha Jamet. En esa universidad conoce a grandes personalidades en especial al Dr.  C. Schwabe, profesor de Salud Pública y Epidemiología, quien concibió la Maestría de Medicina Veterinaria Preventiva como una alternativa a la Maestría en Salud Pública para los veterinarios que trabajaban en los ministerios de Agricultura y que tuvieran a cargo los programas de Salud Animal. Su asesor fue el Dr. Sadler director en la universidad del programa de Maestría de Medicina Veterinaria Preventiva. En este capítulo de su vida, el Dr. Málaga refiere al Dr. Charles E. Franti, profesor de Biostadística,  del que más aprendió, además, conoce a importantes y entrañables amigos como el Dr. Roberto Goic quien después sería su jefe en el Centro Panamericano de Fiebre Aftosa en Rio de Janeiro.

De regreso a Lima, retoma sus actividades académicas como profesor auxiliar y se hizo cargo de la enseñanza de Bioestadística para los alumnos del primer año de facultad y de Epidemiología a los de cuarto año, constituyéndose en el primer profesor de Epidemiología para estudiantes de medicina veterinaria en el Perú. Asimismo, luego de capacitarse en Cálculo en la Universidad Agraria La Molina, introduce la enseñanza de Cálculo para los alumnos del primer año.

Fue coordinador del Departamento de Medicina Preventiva y Salud Animal, en la facultad de Medicina Veterinaria y de Matemáticas en la facultad de Matemáticas, en la ciudad universitaria.  Luego asume la cátedra de Ecología.

En el Departamento de Medicina Preventiva trabaja con la Dra. Elva López Nieto y el Dr. Luis Inope Cúneo. Con quienes a través de cuatro tesis elabora el primer censo canino y felino que fue editado por el Ministerio de Salud y fue la base para la tesis de Rodríguez Frías, al proporcionar denominadores para caracterizar la epidemiología de la rabia canina en Lima Metropolitana, trabajo que se publicó en 1976 en el boletín de la OPS.

En 1971, recibe un contrato de la OPS como asesor temporero para realizar un estudio de la enseñanza veterinaria y las funciones de los médicos veterinarios en los Ministerios de Salud. Para ello, visita 11 países y 33 ciudades en dos meses. Los resultados de este estudio fueron presentados en 1973 en Bello Horizonte, y publicados, conjuntamente con el Dr. Pedro Acha, en la Revista Educación Médica y Salud. Luego de publicar diversos estudios y de enseñar los cursos de Bioestadística y Diseño Experimental, recibe la invitación del Gobierno de Brasil para desarrollar consultorías en el Programa de Control de la Fiebre Aftosa.

En setiembre de 1973, empieza a trabajar en el Centro Panamericano de Fiebre Aftosa y, entre otras actividades, asesora en el Censo Agropecuario del Estado de Rio de Janeiro, dirige dos estudios de riesgo de fiebre aftosa los que son publicados en el boletín del Centro y presentados en un Congreso Brasileño de Medicina Veterinaria. Como consultor del Centro Panamericano de Fiebre Aftosa realiza asesorías en Bolivia, en las ciudades de Santa Cruz y Cochabamba, donde pasa momentos difíciles por las constantes conflictos políticos.

Los cursos de Epidemiología en Pan Aftosa fueron parte de su responsabilidad y en 1976 se dio el primer curso de Sistemas de Información y Epidemiología a cargo de los Drs. Vicente Astudillo, Feliz Rosemberg y Hernán Málaga, a la que asistieron muchos colegas peruanos amigos del Dr. Málaga.

En 1977, de regreso a Lima, retoma sus actividades en la UNMSM: realiza, en Pachacámac y Lurín, con los alumnos de Clínicas de Salud Animal y Salud Pública, un censo y vacunación canina contra la rabia. A la par, llevó a cabo un catastro de ganaderos, base para un estudio de brucelosis. En ese mismo año, realizó un estudio sobre la asociación temporal de celo-rabia, concluyendo lo importante que es vacunar a los perros entre los meses de agosto y setiembre.

En 1979, regresa al Centro Panamericano de Fiebre Aftosa, y asiste a un congreso en Australia donde conoce al director de Sanidad Animal de Nueva Zelanda, quien le refiere que “no hay nada mejor en la dirección de un proyecto que implicar al dueño del problema” frase que lo impacta y mantiene en su mente y que refiere a la necesidad de trabajar con las comunidades.

En febrero de 1981, es convocado a Panamá, como parte del equipo para establecer un sistema de vigilancia epidemiológica en todos los países de Centro América y Panamá. En agosto de 1984, como veterinario de salud pública llegó a Venezuela donde permaneció 12 años, llegando a ser designado, a solicitud de las autoridades venezolanas, representante de la OPS.

En 1989, promueve la Asociación Venezolana de Epidemiología, siendo nombrado su primer presidente. En 1990 publica su primer libro de Epidemiología. En 1990, es declarado Veterinario del Año por el Colegio Médico Veterinario del Perú.

Como Representante de la OPS/OMS para Venezuela, Antillas Nerlandesas y Aruba, estableció que la mejor estrategia para la cooperación técnica era a través de los municipios saludables. Sobre ello, el Dr. Málaga menciona en sus memorias lo siguiente “… las iniquidades de salud eran producto más de la condición de vida de los pueblos, que de toda respuesta de los servicios de salud…”. Por ello, a través de su vida, para el Dr. Málaga ha sido importante priorizar las intervenciones para subsanar las necesidades básicas insatisfechas de la comunidad. En marzo de 1995, en el Congreso Internacional de Ciudades Saludables y Ecológicas presentó el trabajo “proyecto municipios hacia la salud: la experiencia venezolana”.

En 1995, recibe la medalla de honor al mejor gerente (representante), por su gestión en Venezuela de manos del director  de la OPS, George Alleyne. Para el 7 de abril del 1996, día mundial de la salud, la OMS escogió el tema de los municipios saludables lo que constituyó un orgullo para Venezuela. Al partir de Venezuela, recibe la Orden Francisco Miranda, en primera clase. máxima distinción de Venezuela. además de las 28 placas de reconocimiento por su labor en sus 12 años de servicio en Venezuela. en 1999, tras una invitación a Venezuela, recibe de manos de Oscar Feo, Director Regional de Salud del estado, la Orden de Aragua,  la medalla como reconocimiento a su gestión como  representante de la OPS, en Venezuela y por su apoyo al combate del dengue.

En 1996, ocurre un acontecimiento inolvidable en su vida, ya que por segunda vez visitó al papa Juan Pablo II, pero esta vez le extendió un saludo personal como representante de la OPS en Venezuela.

A fines de julio de 1996, el mismo Dr. Arleny, le comunica su pase a la representación de la OPS en Colombia. En Colombia se siguió con el modelo que se había trazado en Venezuela. Como resultado de su experiencia de municipios saludables, publica su libro “promoción de la salud: como construir vida saludable”. En el año 2000, recibe del gobierno colombiano la Cruz Cívica Jorge Bejarano.

En mayo del 2001, pasó a Paraguay, como representante de la OPS continuando con sus proyectos de ciudades saludables. En el 2001, inicia un proceso de fronteras saludables con el mismo objetivo de sus conocidos municipios saludables, que al final del 2002 forma parte de la red nacional de municipios saludables. En diciembre del 2003 se logra establecer en Asunción la ordenanza de restricción de horarios de expendio de licor.

En todos estos años, siempre estuvo ligado a la docencia a través de sus cursos de actualización, incluidos los de Bioética, una de las grandes preocupaciones del Dr. Málaga, producto de ello publicó su libro “salud pública con enfoque biomédico”.

En agosto del 2003, se retira de la OPS, sin embargo, su permanecía se extiende, hasta febrero del 2004, a solicitud del gobierno de Paraguay, país que le otorga cuatro placas, siendo para el Dr. Málaga la red de municipios saludables del Paraguay, la más apreciada.

En el 2006 se produce el retorno definitivo a Lima, donde celebra bodas de oro de la promoción del Colegio San Luís. En Lima es llamado a la Universidad Peruana Cayetano Heredia como asesor de la dirección de posgrado, por el Dr. G. Leguía, en ese entonces decano de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia, cargo que ejerció hasta el 2008. El 2 de marzo del 2007 decide hacer su doctorado, obteniendo el grado de Doctor en Salud Pública en marzo del 2011. con la tesis: “Restricción de horarios de expendio de bebidas alcohólicas (ordenanza municipal 008-7) y su posible relación con la violencia en el periodo 2005-2008 en el municipio de la Victoria, Lima, Perú:  Ley Zanahoria“.  En julio del 2015 se realizó la celebración de las bodas de oro de la promoción de médicos veterinarios “Arthuro Tello Garust”.

La docencia en la Universidad Ricardo Palma la inicia en 2011, invitado por el Dr. Jesús Gutiérrez, director de la Escuela Profesional de Ciencias Veterinarias de entonces, para el dictado del curso de Formulación de Proyectos en Ciencias Veterinaria, luego el curso Seminario de Tesis y en el 2012 el curso de Salud Pública. En el ínterin, publica el libro: “formulación de proyectos de investigación en salud pública y salud animal”. Del mismo modo, realiza modificaciones en la enseñanza de la Salud Pública, dándole otro cariz con el reconocido proyecto “Desarrollo de la Comunidad saludable de los Jardines de Manchay”.

 

Muchas gracias.

jueves, 22 de agosto de 2024

ORIGEN POLIFILÉTICO DE LA MEDICINA VETERINARIA Y LA IMPORTANCIA DEL CÓDIGO HAMMURABI

Se revisan el origen polifilético de la profesión médica veterinaria y la importancia del Código Hammurabi como pieza arqueológica de importancia en la historia de la medicina veterinaria por ser la primera que hace referencia escrita de esta actividad.



ORIGEN POLIFILÉTICO DE LA MEDICINA VETERINARIA Y LA IMPORTANCIA DEL CÓDIGO HAMMURABI

Felipe San Martín H.

Inicio de la profesión médica veterinaria

El origen y desarrollo de la medicina veterinaria están estrechamente vinculados a la evolución de la  civilización misma. Desde el momento en que los seres humanos domesticaron animales por primera vez y comenzaron a utilizarlos con fines prácticos, surgió la necesidad de resolver problemas relacionados con la salud, reproducción y alimentación. 

La profesión médica veterinaria se describe como polifilética, un término utilizado en biología para referirse a grupos de organismos que no comparten un ancestro común reciente, pero que han desarrollando características similares de manera independiente. En el contexto de la medicina veterinaria, esto significa que la profesión no surgió de una única fuente o tradición, sino que se desarrolló de manera independiente en diferentes lugares y contextos. De esta manera, diversas culturas y sociedades contribuyeron al desarrollo de esa profesión, cada una con sus propias influencias y enfoques.

Como ejemplo de lo señalado en el párrafo anterior, en el antiguo Egipto, se han encontrado registros de tratamientos  que datan de épocas tan tempranas como el 2000 a.C., donde se aplicaban tratamientos a animales como gatos y perros. En China, la medicina veterinaria tiene raíces profundas, con tradiciones médicas que incluían el tratamiento de enfermedades en animales. En la antigua Roma y Grecia existían los "hipiatras", médicos especializados en el cuidado de caballos. En la India hay textos antiguos que hacen referencia a la medicina veterinaria, incluyendo procedimientos quirúrgicos para animales. En la Europa medieval, el conocimiento de la medicina veterinaria también se desarrolló de manera independiente, especialmente en relación con el cuidado de caballos utilizados en la guerra y la agricultura.

El Código de Hammurabi

Las primeras ciudades y estados de la humanidad surgieron en Oriente Medio, en las regiones que hoy se corresponden con Irak, Siria y los países limítrofes. La agricultura y la ganadería permitieron que las poblaciones nómades se establecieran permanentemente. Con la domesticación de los primeros animales de producción (vacas, ovejas) y de trabajo (caballos, asnos), junto con la introducción de los primeros cultivos, desapareció la necesidad de estar en constante movimiento en busca de alimentos.

 La civilización humana, tal y como la conocemos hoy, comenzó, como lo señalamos, a dar sus primeros pasos en Oriente Medio donde surgieron los primeros veterinarios encargados de velar por la salud de los animales domésticos. Sin embargo, se sabe poco sobre cómo se formaban y qué técnicas utilizaban para llevar a cabo su labor.

El Imperio Babilónico fue uno de los principales estados que se desarrollaron en la región de Mesopotamia. El periodo de mayor esplendor de Babilonia se produjo durante la primera mitad del siglo XVIII a. C., durante el reinado de Hammurabi, quien gobernó entre los años 1792 y 1750 a. C., como sexto rey de la primera dinastía babilónica. Hammurabi, según los historiadores, heredó un pequeño estado de tan solo 50 km2, que logró expandir hasta convertirlo en un vasto imperio que abarcaba desde el Mediterráneo hasta el Golfo Pérsico.

Este rey no solo extendió su dominio, sino que también articuló esa gran nación con una serie de reformas legales y administrativas que se plasmaron en una recopilación de leyes conocido como Código de Hammurabi. Este Código compuesto por 282 artículos, reúne las leyes de la antigua Mesopotamia en un intento de uniformizar y universalizar el sistema legal. Este Código es el más antiguo y completo de la historia, abarcando aspectos del comercio, derechos de propiedad, las leyes familiares y la justicia.

El Código intentó regular las relaciones humanas en el heterogéneo imperio Babilónico, y debía ser obedecido de manera uniforme por todos. De esta forma, en caso de que que ocurriera A, el juez debía actuar siempre de manera B, siguiendo un protocolo establecido. Además, dado que el  Código de leyes fue dictado por los dioses, era considerado sagrado, inamovible y estable. Es decir, este Código presentaba al menos cuatro características de la ciencia moderna: la búsqueda de leyes universales, el intento de unificación de todas las normativas, la introducción de protocolos de actuación reglada, utilizados y respetados por todos, y, finalmente, la estabilidad de estas leyes, aunque en este caso su estabilidad derivaba  de su origen divino.

El Código de Hammurabi esta tallado en idioma acadio con escritura cuneiforme en una estela de diorita negra de 2.5 m de altura, y debió estar expuesta en un lugar público, aunque el nivel de analfabetos del imperio era muy alto.  El carácter sagrado del Código se refleja en la parte superior de la estela, donde figura como el dios Shamash, titular de la justicia, le entrega el Código al rey Hammurabi. Esta estela fue encontrada en Susa, Irán, donde fue llevada como botín de guerra, actualmente se conserva en el Museo de Louvre, Paris, Francia.

El Código de Hammurabi es importante en la historia de la medicina veterinaria porque es el primero que hace referencia escrita de la actividad veterinaria. En particular dos de los 282 artículos, el 224 y el 225, que regulan la actividad de los veterinarios.

“Artículo 224. Si un veterinario hace incisión profunda en un buey o en un asno y le salva la vida, el dueño del buey o del asno le dará al médico un sexto de siclo de plata como paga”.

“Artículo 225. Si hace incisión profunda en un buey o un asno y le causa la muerte, pagará al dueño del buey o del asno una cuarta parte de su valor”.

Como hecho curioso también existe el Artículo 250 que señala “Si un buey furioso cornea en su carrera a un hombre, y éste muere, esta causa no trae reclamación”

Estos artículos reflejan la importancia y respeto que ya se otorgaban, en esa época, a la profesión de la medicina veterinaria , estableciendo normas para definir honorarios y penalizar el trabajo según los resultados de las intervenciones. Algunos interpretan que la sanción establecida en el artículo 225 responde a la presencia , en aquellos tiempos, de falsos veterinarios o personas sin escrúpulos que practicaban esta actividad sin el conocimiento y las habilidades necesarias, tal como ocurre en nuestro medio en la actualidad.

Referencias

ELANCO. Hitos de la historia veterinaria. Roma: Nace el término “Veterinarius”. https://www.historiaveterinaria.org/update/cuadernohistoriaelanco- 1525333808.pdf

            Minecan Ana. La escritura y las leyes: el código de Hammurabi. WWW.anaminecan.com

Joshua J. Mark 2021. El Código de Hammurabi. https://www.worldhistory.org/trans/es/1-19882/el-codigo-de-hammurabi/

Madariaga de la Campa, Benito. 1974. Los veterinarios en la literatura. Revista Veterinaria Venezolana. XXXVII, N.216 https://www.historiaveterinaria.org/update/1974_los-veterinarios-en-la-literatura-1464075752.pdf

           

 

sábado, 17 de agosto de 2024

PATRICK GUILBRIDE: Director Internacional del IVITA

Esta reseña aborda la destacada trayectoria del Dr. Patrick Guilbride, quien fue designado por la FAO como Director Internacional del Instituto Veterinario de Investigaciones Tropicales y de Altura(IVITA) entre 1963 y 1973, el relato se basa mayormente en las experiencias que el Dr. Guilbride describe en su libro “Far Away Cows” escrito en 1998 durante su retiro en Sudáfrica. 


PATRICK GUILBRIDE: Director Internacional del IVITA

Felipe San Martín H.

Manuel Carpio N.

En la década de 1960, Perú atravesaba un período de inestabilidad política y socioeconómica. Durante este tiempo, ocurrieron eventos clave como el final del segundo gobierno del presidente Manuel Prado y Ugarteche (1956-1962), el primer gobierno democrático de Fernando Belaúnde Terry (1963-1968) y el golpe de estado liderado por el general Juan Velazco Alvarado en 1968. En el ámbito académico, la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM) estuvo bajo la dirección del Dr. Luis Alberto Sánchez (1961-1963), seguido por el Dr. Mauricio San Martin Fraysinett (1963-1966) y nuevamente por el Dr. Sánchez (1966-1971). En la Facultad de Medicina Veterinaria (FMV), los decanos de este período fueron: Dr. Teodoro Ramos Saco (1952-1961), Dr. Manuel Moro Sommo (1961-1964), Dr. Humberto Ruiz Urbina (1964-1967) y Dr. Elmo de la Vega Diaz (1967-1969).

Este periodo estuvo marcado por cambios significativos que impactaron en la vida política del país y, a su vez, se reflejaron en el ámbito universitario, con modificaciones importantes en la ley universitaria. En ese escenario, en abril de 1961, el Consejo de la FMV creó oficialmente el IVITA, (Creación del IVITA) y en mayo fue ratificado por el Consejo Universitario de la UNMSM. En agosto del mismo año, la FMV designó una Comisión Organizadora del IVITA, presidida por el Dr. Teodoro Ramos Saco e integrada por los doctores Alberto Cubas Caparó, Carlos Chávez García y Javier Barúa Castañeda. 

En octubre de 1962, el Consejo Universitario de la UNMSM resolvió que el decano de la FMV asumiera la Dirección Nacional del IVITA, cargo que recayó en el Dr. Manuel Moro Sommo, en reemplazo del Dr. Teodoro Ramos Saco. El 20 de diciembre de 1962, se firmó el plan de operaciones del proyecto IVITA. En el mismo mes, la FAO, como unidad ejecutora del proyecto IVITA, designó al Dr. Patrick Guilbride como Director Internacional del IVITA, quien asumió sus funciones en abril del 1963.

El Dr. Patrick Guilbride, nació en Kendal, Westmorland, Inglaterra, y pasó sus primeros cinco años de vida en Uganda donde su padre dirigía una empresa importadora/exportadora. Se educó en Somerset, Inglaterra y se graduó como médico veterinario en el Royal (Dick) Veterinary College, en Edimburgo, Escocia, convirtiéndose en miembro del Royal College of Veterinary Surgeons (MRVS).

Inició su carrera como médico veterinario en 1943 en norte de Rodesia (1943-1946) y, posteriormente, trabajó como funcionario de la FAO en Jamaica (1946-1957), en Uganda (1957-1963), Perú (1963-1973), Brasil (1973-1975) y Mozambique (1975-1982), donde finalmente se jubiló y se estableció en Sudáfrica.

En 1998, el Dr. Guilbride, publicó “Far Away Cows” un libro en el que relata sus 36 años de trabajo en la FAO en cinco países. El capítulo cuarto, sobre su estancia en el Perú, está especialmente dedicado a su amigo el Dr. Manuel Moro, destacando sus cualidades como administrador e investigador, tanto como decano de la FMV, así como Director Nacional del IVITA. El éxito del proyecto IVITA, según Guilbride, se debió en gran medida a la dedicación, visión y arduo trabajo del Dr. Moro.

El libro no sólo narra el avance del proyecto IVITA, sino que también incluye experiencias vividas por el Dr. Guilbride en Perú, todo contado con un sentido del humor inglés. Por ejemplo, comenta que al llegar al aeropuerto de Lima se sintió afectado por el fuerte olor a harina de pescado, producto de las fábricas cercanas, también menciona el caótico tráfico limeño, que lo disuadió de manejar en la ciudad y la famosa impuntualidad peruana, que comparó diciendo que la diferencia entre la hora inglesa y la hora peruana era de aproximadamente 60 minutos. Asimismo, le llamó atención la tendencia a posponer compromisos y la falta de coordinación y objetivos comunes en el ambiente académico.

La adaptación del Dr. Guilbride a la realidad peruana, según el libro, no fue fácil, pero reconoce que contó con el apoyo incondicional del Dr. Moro y su entorno en diferentes aspectos del proceso de adaptación, lo que ayudó a mitigar sus frustraciones en este proceso.

En cuanto al proyecto IVITA, Guilbride relata las diversas dificultades de que enfrentó para poner en marcha las estaciones del IVITA en El Mantaro, Pucallpa, La Raya y otras subestaciones. En el IVITA-El Mantaro, (IVITA-El Mantaro), destaca los esfuerzos para construir el edificio de la estación, la cual, debido a presiones de alto nivel, fue inaugurado sin que las instalaciones básicas y los laboratorios estuvieran completamente terminados. También menciona las dificultades de la Línea de Avicultura, (Linea de Avicultura), para establecer un programa avícola sólido en la región andina, a pesar de las adversidades impuestas por la altitud.

Primeros miembros de la estación IVITA-El Mantaro

Respecto a IVITA-Pucallpa (IVITA-Pucallpa), describe el trabajo de instalación de las pasturas en el bosque tropical húmedo, con la ayuda de la maquinaria de la empresa Le Tourneau, que poseía la granja Tournavista. 

El Dr. Guilbride fue fundamental en la implementación del plan de operaciones del proyecto IVITA, que abarcó no solo gestiones académicas, sino también coordinaciones con entidades estatales, lo que le permitió conocer de primera mano la burocracia peruana. Además, tuvo que ubicar y contratar expertos internacionales para los programas de investigación y la capacitación de los investigadores nacionales.

En resumen, al Dr. Guilbride compartió momentos clave de nuestra vida institucional y fue una pieza importante en la implementación del Proyecto IVITA, conjuntamente con el Dr. Ramos Saco, inspirador del proyecto, y el Dr. Manuel Moro, en su implementación y su rol como primer director nacional.

 

Referencias

Patrick Guilbride 1998. Far away cows. Veternary Vignettes from the Third World. The Book Guild Ltd. Sussex. England. p655   

lunes, 12 de agosto de 2024

ENTREVISTA A LA DRA. NORMA NOE MOCCETTI

Presentamos una entrevista a la Dra. Norma Noe Moccetti, realizada por el suscrito en los primeros años de este siglo y publicada en Veterinoticias, boletín informativo de la facultad de Medicina veterinaria (FMV). La Dra. Noe ex docente de la FMV de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, a quien sirvió por más de 50 años, relata pormenorizadamente muchos pasajes de su paso por la universidad; tales como: el examen de admisión; las asignaturas; sus maestros; sus compañeros promocionales; su ingreso a la docencia; la capacitación de posgrado; y el tratamiento que tuvo como mujer durante su paso por una carrera conformada, en aquellos tiempos, eminentemente por varones. De esta manera, esta entrevista tiene la peculiaridad de describir momentos de la época, desde los inicios de los 60 del siglo pasado, en que la doctora estudió la carrera y luego ejerció la docencia en San Marcos.

 

Entrevista a la Dra. Norma Noe Moccetti

Entrevistamos a la Dra. Norma Noé, docente del Laboratorio de Medicina Preventiva y con muchos años dedicada a la docencia e investigación y Miembro Titular de la Academia Peruana de Ciencias Veterinarias.

¿Cómo decidió estudiar Medicina Veterinaria?

Siempre tuve perritos, uno por vez, y me acostumbré a ellos desde muy pequeña. Conocía, por ser del barrio de Jesús María, donde viví los primeros 23 años de mi vida, al Dr. Alberto Sato Sato y sabía que él se ocupaba del cuidado de las mascotas. Siempre recibí el apoyo de mi madre para que siguiera estudios de medicina veterinaria, en cambio mi padre me preguntó ¿Porqué no estudias farmacia u otra profesión más femenina?.

Cursando los últimos años de media en el Colegio «San Jorge» de Miraflores, donde estudié por 12 años, decidí prepararme en la Academia Pre-Universitaria de la cuadra 18 ó 19 de la Avenida Arequipa, en Lince. El director de la Academia Pre-Universitaria era el Dr. Aníbal Ísmodes Cairo, sociólogo y profesor de la Universidad de San Marcos, en quien reconozco sus cualidades de pedagogo, no por sus enseñanzas sino por la forma como dirigía la Academia.

Casi en vísperas de dar el examen de admisión, en el mes de febrero de 1961, en carnavales, conocí al Dr. Guillermo Meini Sponza, entonces estudiante de medicina veterinaria en la UNMSM, quien estaba por ingresar al segundo año, él me refirió lo difícil que eran los estudios sobre todo el primer año, que el acababa de terminar, pero también me supo dar bastante entusiasmo para estudiar la carrera.

Cuando postulé en 1961, pasé por el examen de tres días, el cual se tomaba en la actual facultad. Los exámenes escritos eran: un día de Letras, otro día de Ciencias, se dieron el 2 y 7 de marzo. En el tercer día, si habías aprobado los exámenes escritos, pasabas a la entrevista oral, la cual tuvo lugar el 13 de marzo. El Dr. Emilio Gordillo Angulo, quien era el secretario general de la facultad, supo darnos bastante aliento, en este trance difícil de tres exámenes consecutivos. En la entrevista oral recuerdo mucho que el Psicólogo Dr. Gustavo Saco Miro Quesada, todo el tiempo me fijaba la mirada, lo cual era propio de su profesión, mientras la suscrita contestaba las preguntas del jurado conformado por tres profesores de la facultad. Acababa de salir del colegio en el mes de diciembre del 60 y ya en marzo del 61 estaba en un acto académico bastante protocolar. Recuerdo que ingresamos 31 postulantes, 2 mujeres y 29 hombres.

¿Coméntenos algunas de sus experiencias como estudiante y en qué se diferencian aquellos tiempos con los actuales?

En el año que ingresé, estudié Pre-Veterinaria, la cual se hacía en la Casona del Parque Universitario y allí llevaba cursos que compartíamos con los estudiantes de Pre-Médicas, tales como Anatomía Comparada, donde ellos eran como 200 y nosotros un grupo pequeño. Algunos cursos como Zoología General, dictado por el Dr. Fortunato Blancas Sánchez, se daban en el Museo de Historia Natural de la Av. Arenales y compartíamos con Ciencias Biológicas. Movilizarse era bastante difícil, pues era la época del «caos» del tráfico del Parque Universitario y de la abundancia de ambulantes. 

Mis experiencias como estudiante están muy relacionadas a mis profesores, tuve como profesores a los Drs. Pedro Coronado Arrascue (Botánica General), Octavio Velarde Núñez (Botánica Médica y Agrostología), los Médicos Claudio García Llaque (Anatomía Comparada), Alejandro Tapia Freses (Química Aplicada a las Ciencias Biológicas), Mauricio San Martín Fraysinett (Genética), Alberto Cuba Caparó (Patología General), los Médicos Veterinarios Javier Barúa Castañeda (Nutrición Animal) y Max H. Lombardi (Bioquímica), Quiterio Núñez Miranda y Alberto Sato Sato (Anatomía), Marcos Copaira Beltrán y Héctor Palomino Martorell (Histología y Embriología), Manuel Moro Sommo (Bacteriología e Inmunología/Bromatología) y Dante Castagnino Rossi (Bacteriología e Inmunología/Higiene Veterinaria), Saúl Fernández Baca (Zootecnia General y Especial), Elmo De la Vega Díaz y como Jefe de prácticas Luis Tabacchi Navarrete (Patología Especial), Carlos Guerrero Díaz y Virgilio La Rosa (Parasitología), Humberto Ruíz Urbina, Julio Vergara Olórtegui, y Víctor Fernández Anhuamán (Medicina Operatoria de Animales Pequeños/Farmacia/Farmacología), Augusto Vallenas Pantigozo (Fisiología), Marek Rakower Cavero y Gustavo Ayllón Rodríguez (Diagnóstico Clínico y Patología Médica), Carlos Narváez Obeso (Patología Quirúrgica), Hugo Casas Pérez (Reproducción), Hans Andresen Suchier (Medicina Operatoria-Animales Grandes), Augusto Castillo Giraldi (Patología Clínica), Wilfredo Calderón Vera  (Zootecnia), Ramiro Oballe Morante (Cirugía de Mayores), Julio Alencastre Alvarado (Enfermedades  Infecciosas), Mariano Alfaro Espinar(Medicina Operatoria-Equinos), Arturo Tello Garust (Avicultura y Enfermedades de Aves), Gino Comotto Barrantes (Práctica Aves), Luis Sáenz Iparraguirre (Porcinos), Juan Zapatel Vásquez (Salud Pública Veterinaria). En Clínicas los Drs. Luis García Tweddle (Hipódromo), Mariano Alfaro Espinar (en La Remonta del Ejército), Helmut Kafka (Obstetricia Mayores). Mis disculpas por no haber mencionado a todos. 

Sólo como anécdota, algo que me quedó «grabado», es que a pesar de obtener la mejor nota final en Patología con el Dr. Cuba y habérseme ofrecido la ayudantía, en el Acta salió con un punto menos y no logré que la cambiaran. En esa época eran únicamente preguntas «abiertas». Ahora el alumno, por el tipo de examen, puede obtener notas altas y revisar por décimas. Hay más oportunidades y más comunicación. Tuvimos, como Promoción, mucha suerte en tener la plana docente mencionada.

Luego de exponer los nombres de la gran mayoría de los que conformaban la plana docente, me gustaría contar también como anécdota, tres episodios relativos al desarrollo de las Clínicas. El primero se produjo con el Gerente de la Cerro de Pasco Corporation, el Señor Schneider, quien no nos aceptó, a mí y a mi compañera de promoción, Denise Chauca Francia, simplemente por pertenecer al género femenino. Esa Clínica de ovinos fue llevada a cabo en la estación IVITA Huancayo y sus diferentes laboratorios y trabajos de campo. Tuvimos la oportunidad de conocer al Sr. Schneider, que nos llevó a la esquila a la unidad de producción Consac, de la SAIS Tupac Amaru. Él nos explicó que no podía responsabilizarse de nosotros en la empresa Cerro de Pasco Corporation. El segundo episodio se produjo cuando llegamos al establo Punchauca, ubicado en el camino a Canta, el Dr. Eduardo Gonzales Godoy, nos dijo que, si estábamos de acuerdo, participábamos en todo lo que creíamos conveniente. Nosotras dijimos que esperábamos igual trato que el resto de alumnos. El tercer episodio, ocurrió cuando llevamos la asignatura Clínica de Mayores en el establo Montejato cerca de Cañete. Allí, el Dr. Hans Andresen Suchier nos dio un trato igualitario y nos acostumbró a una disciplina extrema, lo cual le agradezco, pues allí no hubo diferencias de género. Hacía que nos despertaran a la hora que fuera necesario, en caso que se presentaran partos distócicos. También nos dejó trabajo desde las primeras horas de la madrugada, que consistía en realizar el muestreo para control de mastitis bovina, mediante el método de California Mastitis Test (CMT), este control se hizo en todo el establo y fueron unas 300 vacas las muestreadas.

Comparando épocas, actualmente hay más comunicación del profesor con el alumno, anteriormente era muy escasa. Los exámenes no son únicamente preguntas abiertas, como entonces. Vale resaltar la diferencia en asignaturas, las cuales me gustaría mencionar por año, en detalle, para tener presente como era en esos años.

Asignaturas Pre-MedVet, Facultad de Ciencias (1961): Castellano, Revisión y Elementos de Matemáticas Superiores, Zoología General, Química Aplicada a las Ciencias Biológicas, Física Aplicada a las Ciencias Biológicas, Anatomía Comparada, Biología, Botánica General e Inglés.

1er Año, FMV (1962), seis Asignaturas: Anatomía, Bioquímica, Botánica Médica y Agrostología, Genética, Histología y Embriología y Zootecnia General.

2do Año, FMV (1963), seis Asignaturas: Bacteriología e Inmunología, Farmacia y Materia Médica, Fisiología, Patología General, Parasitología y Zootecnia Especial.

3er Año, FMV (1964), 12 Asignaturas: Avicultura, Diagnóstico Clínico, Enfermedades Parasitarias, Farmacología y Terapéutica, Higiene Veterinaria, Medicina Operatoria (Animales Pequeños), Medicina Operatoria (Animales Grandes), Nutrición Animal, Patología Especial, Patología Médica, Patología Quirúrgica y Reproducción.

4to Año, FMV (1965), siete Asignaturas: Bromatología, Enfermedades de Aves, Enfermedades Infecciosas, Inspección de Carnes, Obstetricia, Patología Médica y Salud Pública Veterinaria.

Ud. perteneció a una Promoción muy unida, ¿díganos a qué se debe esa unión? y quiénes conforman la Promoción?.

Pertenezco a la Promoción 1965 «Arturo Tello Garust», la cual efectivamente es muy unida. Uno de los motivos es que siempre nos hemos mantenido en contacto, factor fundamental para mantener la amistad que hemos cultivado durante los años vividos en nuestra facultad. Es una Promoción que se caracteriza por el respeto por nuestras autoridades, maestros y personal administrativo y de apoyo. Un buen número de los que ingresamos juntos llegaron de provincias, a ellos se sumaron otros que encontramos en el camino, hallando terreno fértil y respuesta muy positiva y buena disposición para nuestras reuniones periódicas, en donde intercambiamos ideas e inquietudes. Cabe resaltar que las actividades gremiales nos han unido. Así nuestra participación en el Colegio Médico Veterinario (CMV), en la Asociación de Médicos Veterinarios (AMV) y las invitaciones de nuestra facultad para reencuentros han servido mucho a esta unión. Nos reunimos con cierta frecuencia, nunca falta la reunión anual, en la cual se elige la directiva. Una «pieza clave» es el promocional Raúl Ramírez Uribe quien tiene el mérito, de haberse comunicado con todos a lo largo de los años. 

La Promoción 1965 celebró las Bodas de Plata en 1990, con una semana de actividades principalmente en el CMV/AMV, dado que en esa época no se celebraba en la FMV, asimismo, estamos muy agradecidos al actual decano, Dr. Felipe San Martín Howard, quien nos dio un espacio para colocar la Placa de las Bodas de Plata, en una ceremonia especial el 25 de noviembre del 2005, donde asistimos 23 integrantes, luego de una Misa en la Iglesia de San Francisco de Borja. También agradecemos a nuestros profesores que asistieron y a nuestro padrino.

Algunos miembros de nuestra Promoción son: Denise Chauca Francia, profesora de la FMVZ de la UPCH. Raúl Hurtado Vela, ex-decano del Colegio Médico Veterinario Departamental de Lima, Agustín Napurí Correa, profesor en La Cantuta, Mariano Nieva Baldeón, ex-decano del CMV del Perú, Raúl Ramírez Uribe y Hernán Málaga Cruz, ambos expresidentes de la AMV del Perú. Hernán ha sido Representante de la OMS/OPS en Colombia, Venezuela y Paraguay, Gabriel Romero Priddat, dedicado a animales menores, Raúl Santiváñez de Vivanco, propietario de un Establo en Trujillo, Luis Ugaz Apaestegui, Director de Vigilancia Epidemiológica del SENASA, Humberto Zárate Jurado, miembro destacado en actividades pedagógicas. Hemos sido 43 integrantes. Rindo homenaje a mis compañeros de Promoción fallecidos: Juan Dávila Reátegui, Carlos Sánchez Almandoz, Luis Estrada Salcedo, Alfredo Castro Gonzales, Aurelio Otárola Paredes, Luis Torres Cadenillas y Rubén Chávez Mejía.  Algunos integrantes de la Promoción 1965 que también trabajaron en nuestra facultad fueron: Juan Dávila Reátegui en el IVITA-Pucallpa, Denise Chauca Francia en un principio en el IVITA-Huancayo, luego en Lima y Mariano Nieva Baldeón en Lima

¿Cómo fueron sus inicios como profesora en la Facultad y cuáles fueron sus experiencias con los profesores de aquel entonces?

El trabajo de tesis de pre-grado lo hice sobre Salmonella en caninos y la llevé a cabo en Bacteriología (con el Dr. Moro) y en la Clínica de Menores (con el Dr. Rakower), al terminarla el Dr. Manuel Moro Sommo, profesor Principal de Bacteriología me contrató para la Sección de Bacteriología. Inicialmente compartimos el ambiente con el joven Profesor Nicolás Singer Iszak, de la Promoción 1964. Nicolás trabajaba en Tuberculosis con el Dr. Dante Castagnino Rossi. En Bacteriología continúe trabajando hasta 1997.

Oficialmente integro la Plana Docente de la Universidad desde enero de 1967 en que realizaba las prácticas y más adelante la teoría de los cursos de Microbiología. En esos años el Dr. Marcos Copaira Beltrán constituyó un grupo de estudio y discusión, del cual formé parte junto con otros jóvenes Profesores como José Brener Kahn de la promoción 1962 de la Clínica de Menores, y miembros de la Promoción 1964: Kenneth Campos Grace de la Clínica de Menores, José Hernández Dongo de Patología, Elva López Nieto de Salud Pública y César Montalvo Arenas de Histología.

Una anécdota más, siendo profesora de Microbiología de la FMV y estando como decano el Dr. Elmo De la Vega Díaz, vino al Decanato el Representante de la Rockfeller Foundation, para entrevistar a los profesores jóvenes. A pesar de la insistencia del Dr. De la Vega, el Representante se negó a entrevistarme, simplemente se limitó a saludarme, nuevamente la negativa fue por pertenecer al género femenino. Solamente entrevistó a los profesores varones.

Relátenos algunas de las experiencias con sus estudiantes  

En realidad, siempre he aprendido de los estudiantes regulares. Enseñar sabemos que se hace en ambos sentidos, es decir se enseña y se aprende. Debo reconocer que es difícil trabajar con promociones numerosas, como las actuales que cuentan con más de 80 alumnos.

En general, me han dado muchas satisfacciones, fui madrina en 1987, siendo el padrino el Dr. Eddo Caletti Paganin. El colega Carlos Salcedo, quien ejerce en Florida y la Dra. Rosa Perales Camacho, profesora de nuestra facultad, entre otros, se encuentran entre los integrantes de esa Promoción. En los últimos años, 2003, fui Madrina de la Promoción LXV, con 59 integrantes. Por votación y a sugerencia de la suscrita, la Promoción lleva el nombre del Dr. Pedro N. Acha Jamet.

Ud. realizó una serie de viajes de capacitación, relátenos sus experiencias

Tuve la suerte de capacitarme principalmente en tres lugares. Becada por el Consejo Británico (1972) en la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de la Universidad de Londres, Gran Bretaña, donde con especial referencia a Bacteriología, estudié Micología, Virología, Genética y cursos afines. Las dificultades de estudio en Londres consistió principalmente en conseguir un buen alojamiento, con condiciones para poder estudiar. La mayor parte de esos alojamientos estaban destinados a personas provenientes de países del Commonwealth, como Australia y otros, dependientes o relacionados al Reino Unido. Estuve alojada en los suburbios de Londres, Muswell Hill y recién el último año en Kensington. Entre ambos alojamientos estuve unos tres meses en el alojamiento del Ejército de Salvación. Esto lo expongo como una experiencia. Ya que se me brindó toda la ayuda necesaria en otros aspectos. Las clases se daban en grupos mixtos, los internacionales con los médicos británicos residentes en el Reino Unido. El nivel científico era sumamente alto. Muy interesante fue la preparación del inglés en el «Bell School of Languages» de Norwich (East Anglia) y fuimos un mes, con el mismo personal, a estudiar a Birmingham. El curso tuvo una duración de tres meses en total y estuvimos en alojamientos especiales de estudio, en cada caso.

Becada por el Gobierno de Israel (1979), asistí a la Universidad Hebrea de Jerusalén, Israel, en cuya Facultad de Medicina estudié la Maestría en Salud Pública. Teníamos alojamientos especiales, donde podíamos estudiar fácilmente en grupo.  La Biblioteca estaba a disposición y muy cerca de los salones. El Grupo Internacional tenía clases en inglés, separado del grupo de los israelíes, estos últimos recibían las clases en hebreo. Luego vino el trabajo de tesis que incluyó muestreos en el campo y desplazamientos a diferentes «kibbutz» (asentamientos agrícolas cooperativos), brindándoseme todas las facilidades necesarias, tales como una camioneta para ir a realizar los muestreos. Los estudios de la Maestría en Salud Pública, el trabajo de tesis y la sustentación me tomaron 18 meses. La experiencia fue increíble. El fuerte trajín: clases, muestreo, manejo, trabajo en el laboratorio, redacción y revisión de mi tesis, motivaron a que bajara 16 kilos de peso.

En 1994 recibí una invitación como Profesora Visitante al Departamento de Patobiología de la Universidad de Auburn y el Laboratorio de Diagnóstico Veterinario de Alabama en Auburn, Estados Unidos. En el año que estuve allá me familiaricé con el trabajo molecular, asistí a reuniones especiales en varios lugares entre ellos: San Francisco, Baton Rouge, capital de Luisiana, y el mismo Estado de Alabama. Esta visita de capacitación sirvió para posteriormente afianzar la venida de un proyecto tripartito entre Israel, Estados Unidos y el Perú.

¿Cuáles son los aspectos que deben modificarse para mejorar el proceso de enseñanza aprendizaje?

Definitivamente, hacer participar más activamente al estudiante y tener grupos que no excedan los 40 alumnos (ideal). Además, el alumno debe estudiar con anticipación el tema a tratarse, dado que es la única forma de que éste pueda tomar participación directa en la clase. Para ello, debe proveerse bien la Biblioteca y la Hemeroteca. Se recomienda las tutorías y espero que podamos emplear, con éxito, el Syllabus por competencias, que tanto recomienda la Escuela Académico Profesional de nuestra facultad.

¿A qué persona admira más?

Al Dr. P.P. Levine quien fuera Profesor de la Universidad de Cornell en Ithaca, NY y al Dr. Manuel Burga Díaze x-Rector y actualmente profesor de nuestra Universidad.

¿Qué personaje de nuestra historia le hubiera gustado conocer?

Al Dr. Jorge Basadre Grohmann

¿Qué libro le gustaría recomendar su lectura?

Reynaldo entre las Tablas de Pantigoso M.

Gorilas en la Niebla de Dian Fossey

¿Qué película le agradó más?

Ray, sobre la vida de Ray Charles, con Jamie Foxx. Año 2004.

¿Qué cualidades aprecia más en la gente?

La discreción y la honestidad.

¿Qué es lo que más le desagrada de las personas?

Que emitan diagnósticos falsos, sobre todo en aquellas ramas de la Ciencia en que es imperativo llevar una casuística al respecto

¿Cuál es la expresión verbal más usada cuando está molesta? ¿Y cuál cuando esta alegre?

¡Caráspita! y ¡ Aleluya !

¿Cuándo deje esta vida que le gustaría que le diga nuestro Señor en su primer encuentro?

«EN ESTA DIMENSIÓN SE COMUNICA UNO CON TODAS LAS PERSONAS MÁS QUERIDAS».

 

lunes, 5 de agosto de 2024

COLUMELA Y EL VOCABLO VETERINARIUS

Esta breve nota explica el origen y uso universal del vocablo veterinario y el papel que jugó el escritor romano Columela.


COLUMELA Y EL VOCABLO VETERINARIUS

Felipe San Martín H

            VETERINARIUS

En la Antigua Roma el término proveniente del latín veterinarius, se usó para referirse a personas que cuidaban y trataban a animales de trabajo como caballos y bueyes.  Veterinarius tiene su raíz etimológica en la palabra latina veterinus, que se utilizaba en esa época para señalar a los animales de carga o de trabajo, como caballos, bueyes y mulas, que habitualmente eran viejos, por lo que veterinus puede derivarse de la palabra vetus/veteris, formas del mismo adjetivo latino que significa “viejo”. Vetus es la forma nominativa singular, utilizada para el sujeto de una oración. Se usa para todos los géneros. Veteris, es la forma genitiva singular, que indica posesión o asociación y se traduce como “del viejo” o “de un viejo” se aplica a todos los géneros.

Con el tiempo veterinarius, se convirtió en el término para designar a las personas que cuidan y tratan a estos animales, extendiéndose luego su uso a todos los profesionales que tratan la salud de los animales. En general, veterinarius ahora es la raíz etimológica de términos modernos como veterinario y veterinaria.

SUOVETERINARII

Para poner en contexto el uso de este vocablo, se tiene que señalar que los romanos consideraron la salud animal de crucial importancia para su sociedad, tanto en lo militar, como las explotaciones ganaderas, y en los ritos religiosos. Uno de estos ritos religiosos consistía en la purificación de personas, tierras o ciudades, que se denominaba suovetaurilia, por el sacrificio de un cerdo (sus), una oveja (oves) y un ternero (taurus). Las personas encargadas de cuidar estos animales eran los suoveterinarii, que proviene de la combinación de sus (cerdo), veterinarii (veterinarios). Estas personas eran una clase específica de veterinarios en la antigua Roma, quienes estaban especializados en el cuidado de los animales utilizados en los sacrificios rituales y por lo tanto debían asegurar que los animales estuvieran en perfecto estado de salud y cumplan los requisitos rituales. Este cuidado se hacía antes y después de los rituales, lo que incluía la inspección, el tratamiento de posibles enfermedades y el asesoramiento sobre la alimentación y el bienestar de los animales

COLUMELA

Lucio Junio Moderato Columella, mas conocido por su nombre de pluma como Columela, fue un importante escritor y agrónomo de la Antigua Roma, que vivió entre los cuatro años AC hasta los  64 DC. Nació en Gades (actual Cádiz, España), ciudad muy poderosa en la Hispania romana, y es famoso por su obra "De Re Rustica" (Sobre la agricultura), una enciclopedia en 12 libros que trata diversos aspectos de la agricultura y la gestión de fincas rurales, en donde combina los conocimientos agronómicos ancestrales con los innovativos, adquiridos estos últimos principalmente por la experimentación. Este autor es considerado por algunos como el padre de la agricultura antigua.

Columela es reconocido como uno de los primeros autores en utilizar el término veterinarius en la literatura romana. En su obra "De Re Rustica", Columela usa este término para referirse a personas especializadas en el cuidado y tratamiento de animales de granja y de trabajo, como caballos, bueyes y otros animales útiles en la agricultura y la vida rural. Por el reconocimiento que se hace a la obra de Columela y la importancia que tenían los animales para la economía y la vida cotidiana en el Imperio Romano, este autor jugó un papel importante en la formalización y difusión del término veterinario en la literatura y el pensamiento de su época y que ha perdurado hasta el presente.

 El 4 de agosto de 1761, un decreto del Consejo de Estado de Francia, autorizó abrir una Escuela en la que se enseñara públicamente los principios y métodos para curar las enfermedades de los animales. Esta fue la Escuela de Veterinaria de Lyon, que empezó a funcionar en 1762 y fue el primer centro de estudio superior que recuperó el término “veterinaria”, que como se señaló previamente este vocablo fue utilizado por primera vez por Columela pero entró en desuso desde la Edad Media. 

Referencias

  • Adolfo Domínguez Monedero. 2023. Columela, la agricultura convertida en ciencia https://youtube.com/watch?v=aDcpfy85vcw&si=jIbB19m9z5kRTRXB
  • ELANCO. Hitos de la historia veterinaria. Roma: Nace el término “Veterinarius”.        https://www.historiaveterinaria.org/update/cuadernohistoriaelanco-                   1525333808.pdf
  • Villamil J. Luis Carlos. 2011. 250 años de educación veterinaria en el mundo. Revista de Medicina Veterinaria. N. 21. pp 9-12